En el mundo de la música, los medios nos dan a conocer más a esos artistas que tienen un estilo al cual ya estamos acostumbrados. Los típicos que, mientras muchos no son malos, la mayoría son de baja calidad o personajes de laboratorio que no tienen una pizca de talento musical. Reggaetoneros y raperos Trap, sobre todo. Sin embargo, hay artistas con demasiado talento que la prensa siempre tiende a ignorar por su poca accesibilidad hacia la gente. Este blog tuvo como idea original hablar de esos artistas que no aparecen siempre en las noticias y, claro, me he tergiversado un poco. Pero, la base de todo todavía sigue.
Ariel Pink es un ícono en la música Pop actual del que no se habla demasiado en los noticieros. Por lo menos, no mucho aquí en Latinoamérica. Su estilo ha sido tan extraño, debido a sus grabaciones con toques experimentales y psicodelicos con una calidad muy baja de producción, que le han llamado "El Padrino del Chillwave" y el creador del Hypnagogic Pop. El último siendo un estilo en alza y que vino gracias a él con características similares a las antes mencionadas. Sus letras, llenas de mucho surrealismo, han sido también clave en su manera de expresarse. Con protagonistas tan variopintos que, de comentarlos, costaría creerlos.
Admito que los primeros discos de Ariel Pink, los cuales fueron grabados bajo el nombre de "Ariel Pink's Haunted Graffiti", nombre que, por cierto, llevó hasta el 2012, y que remontan a principios de la década pasada, no los he escuchado todos y del que más me acuerdo, The Doldrums (2004), me pareció una loquera completa. Había material que daba a demostrar que Ariel tenía talento, pero era todo tan disperso que nada parecía concordar dentro de su trabajo.
Por suerte, llegó Before Today (2010), el disco que vió a Ariel elevarse entre los críticos como uno de los compositores más originales en el medio. Ese trabajo plasmaba de manera coordinada todo lo que él trataba de demostrar en sus primeros trabajos. Eran una cantidad de canciones muy coloridas y muy pegadizas que me encantaron a medida que volví a escuchar el disco una y otra vez en los años que vinieron. Mature Themes (2012), su continuación, me pareció bueno, pero no tanto como para compararlo con su anterior trabajo. Su primer disco como "solista" Pom Pom (2014) fue Ariel dando rienda suelta a su locura y a su rareza. Es un álbum en donde suena todo raro y hasta caricaturesco y, sin embargo, no puedes evitar escuchar cada canción y corearla. Hubo momentos en que me recordó a unos proyectos de Mike Patton. Era un trabajo que dejó a la gente queriendo más.
En Dedicated to Bobby Jameson (2017) Ariel Pink nos sumerge en una historia de un artista que lo pudo tener todo y se quedó sin nada. Bobby Jameson era un cantautor americano que trataron de impulsar para que se convirtiera en la mayor estrella del Pop a principios de los sesentas pero que luego de una serie de eventos desafortunados, en donde él se metía en problemas con la policía o trataba de suicidarse, las disqueras y las personas alrededor le dieron la espalda. Y era un tipo que trabajó con talentos como los Beach Boys y Frank Zappa. Era un talento que dañó su propia carrera. Luego, se pensó que estaba muerto por varios años hasta que reapareció a través de Youtube, criticando el que una disquera sacara una reedición de uno de sus discos sin su autorización. Continúo con este canal hasta su fallecimiento en el 2015.
Algo de esto cautivó a Ariel para hacer un álbum que, mientras no es conceptual, toma muchas de sus historias como alegorías a su propia vida. Es un disco que no tiene la misma producción o el mismo carisma que Pom Pom , pero contiene temas que logran captar tu atención desde el principio. Canciones llenas de psicodelia y de la locura de Pink que busca llevarte por un recorrido en donde te relajarás y, en momentos, te preguntarás acerca de qué demonios escuchas.
En todo el trabajo, hay dos canciones que, para mi, fueron claves: "Another Weekend", el cual es un ritmo calmado que te transporta al Pink del 2010, y "Time to Live", la cual, en mi opinión, es uno de los mejores singles del 2017 con un trabajo de voces que destaca enormemente y que tiene la epicidad de un "Bohemian Rhapsody" de Queen, claro, sin la enorme voz de Mercury. Es un disco que cumple con las expectativas. No logra superar a Pom Pom , pero, hey, el tipo hizo un material que puede decir que está entre lo mejor del año en diversas publicaciones. Disco recomendado.
Nota: 7/10
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