Recuerdo en mi adolescencia, en el año 2006, donde hubo un grupo que me llamaba mucho la atención, tanto su estilo como su música metalera cuando, en ese entonces, estaba comenzando a descubrir varias bandas de géneros similares, sin esa contemplación del artista de laboratorio o un ojo crítico, sino inmerso como un niño en cualquier banda que saliera en MTV. Una de esas banda era AFI que, para quienes no los conozcan, son una banda americana que se formó en el año 1991 y que, en sus comienzos, antes de ser famosos, tocaban una música muy influenciada por la escena Punk. Eso fue así hasta el año 2003, en donde el grupo alcanzó la prominencia con su álbum Sing the Sorrow (2003), el cual abrazó profundamente elementos más Pop y Emo que, a diferencia de otras agrupaciones, les sirvió de maravilla. Ese álbum tenía cortes que se volvieron himnos para muchos chicos de aquel entonces como "Girl's Not Grey", "Silver and Cold" y mi favorita de ellos "Miseria Cantare - The Beginning".
Tres años después, la banda volvió con Decemberunderground (2006), un álbum que seguía los pasos de su lanzamiento anterior y que les sirvió de mucho comercialmente. Con ese disco fue que conocí a la banda al escuchar "Miss Murder", el cual en su entonces me gustó bastante, al igual que con "Love Like Winter". Luego de eso, la banda decayó en popularidad; ¿razones? Evolución musical, será. A ciencia cierta, no sabría decir, aunque me aferro a lo anterior. La gente se cansa de esos géneros y, con la invasión de tanto Pop y Hip-Hop al final de la década, la posibilidad de ver un regreso triunfal de la banda se veía lejos. Claro, la banda ha lanzado unos álbumes más, pero ninguno han obtenido el mismo éxito que sus trabajos anteriores.
Todo esto nos trae a AFI (The Blood Album) (2017), su más reciente trabajo y uno que tuve que escuchar debido a tantos comentarios en distintas páginas que lo nombraban como un buen álbum. Esto es algo que no me esperaba, así que tenía que comprobarlo. No se imaginan cómo tuve que reescuchar esos viejos discos en donde la mayor parte de ellos no me gusta ahora. AFI no ha envejecido bien conmigo; claro, no diré que no me da nostalgia, pero tampoco que me pongo de nuevo como si fuera un adolescente.
Bueno, para ser sinceros, éste disco no es tan malo como esperaba que fuese. La producción va de decente a buena y la música te lleva de vuelta a mediados de la década anterior, sobretodo por ese aire de Metal Alternativo que posee. La voz de Davey Havok ha madurado y, de forma un poco humorosa, pareciera que pasó por una pubertad ya de adulto. De repente se le oye como el Havok de la década anterior, pero con la voz más grave. Obvio, es por la edad, pero me da risa ya que tenía siglos que no escuchaba AFI. Líricamente, no hay nada del otro mundo que esperarse, salvo que letras con temáticas Emo, ya saben, suicidios, pésimos romances, dolor, etc... Si buscan un álbum innovador, éste no es el suyo. Es cierto que la banda hizo un buen trabajo con esto pero, salvo ciertos toques más Alternativos, la banda sigue siendo la misma y lo que es más, sus letras han bajado la calidad en canciones como "Above the Bridge" y "Dumb Kids", momentos muy débiles en un álbum donde la mayor sorpresa te la llevas al comienzo del disco con el opening "Dark Snow", la cual no es tan buena, pero contiene lo que el álbum te quiere mostrar. No diré que es un mal álbum, pero no es bueno y no es uno que vaya a querer escuchar. Es AFI, sus fanáticos lo adorarán, pero seamos honestos; es un álbum amigable a las radios sin nada interesante que destacar.
Nota: 5/10
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