El último trabajo de Arca, nombre artístico del venezolano Alejandro Ghersi, lo vió a él tomar más riesgos. Este es el primer disco en donde se le oye cantar y es algo que me deja en shock porque tiene una de las voces más emotivas que he escuchado en estos últimos tiempos. A través de ella, puedes sentir un dolor y una tristeza enorme que te puede dejar en un estado de impresión la primera vez que la escuchas. Algo bastante fascinante del productor.
La voz del productor aportó bastante a esta grabación llamada de forma homónima, Arca (2017), debido a que a través de ella le dió más sentido a las composiciones; sentido el cual le faltaban en sus trabajos anteriores, en donde era experimental por serlo. Canciones como "Piel", la apertura del álbum, es un sonido ambiental muy denso a base de sintetizadores y en donde Ghersi canta acerca de quitarse la piel para ser una nueva persona. Una entrada que encaja muy bien con la temática del disco.
Ghersi ha dicho en entrevistas que la intención de él con este trabajo era buscar la belleza hasta en los momentos más tristes, o sea, como encontrar esa sintonía con la depresión, ya que siempre es algo que vamos a estar viviendo en cierto punto. Y, con este disco, lo logra. Su voz brilla en momentos como "Anoche", el cual comienza con un sonido de teclado ambiental, que recuerda a sus trabajos anteriores, y que da paso a un ritmo de un bolero muy lúgubre. "Reverie", mi track favorito, es una canción que tiene letras tomadas de un compositor de aquí llamado Simon Díaz, de música folklórica, mezclado con ritmos llenos de muchas capas que va tomando su forma de manera muy orgánica hacia unos beats muy golpeantes. Tanto la canción como el video son muy impresionantes. "Desafío", otro canción y video bastante impresionantes, y al cual le precede el track instrumental "Whip", que sirve como transición hacia ésta canción, es la canción con más inclinación Pop que ha hecho Arca en su carrera, mezclada con unos beats bastante punzantes como si te estuvieran clavando unos cuchillos.
Ya dejando entredicho esos momentos tan llamativos y que hacen al álbum una aventura horrorizante y, a la vez, erótica, debo decir que el disco presenta varias fallas. Para empezar, Ghersi todavía no ha sabido como crear más coherencia entre pistas; falla que trae desde su primer álbum. Este problema también se traduce a la inclusión de su voz que, en momentos, se sentía como que no encajaba en muchas canciones. Tiene emoción, pero en varias composiciones su voz va por un lado muy distinto al ritmo que lleva, haciéndola ver fuera de lugar.
En conclusión, el tercer álbum del productor es bastante shockeante, tanto musicalmente como por la voz escondida que tenía el venezolano y que no entiendo por qué no la usaba en sus anteriores lanzamientos. Lo más llamativo viene en forma de los tracks que tienen videos, como los anteriormente nombrados, y "Fugaces", otro momento bastante caótico, pero hermoso a la vez. Lo demás, simplemente no tiene esa coherencia o impacto que presentan las otras, haciendo ver el LP como olvidable en varios aspectos. Igual, vale la pena escuchar este trabajo para formarse sus propias opiniones.
Nota: 6/10
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