Como habrán podido notar en muchas de mis reseñas, soy una persona con gustos de música amplios. Diría que demasiado amplios. Así como ahorita puedo escuchar, por decir, Chance The Rapper, a la hora puedo escuchar bandas como Emperor o Ulver. Y, sin embargo, siempre hay algo que relacionó en casi todos; la mayoría son discos con temáticas oscuras. No he publicado todos los discos del cual soy fanático, pero tengo una relación con temáticas depresivas. Al principio, escuchaba Pop y Rock que pasaban en MTV en el 2005, de artistas como Mariah Carey, KT Tunstall, Alanis Morissette y Fiona Apple, y bandas como My Chemical Romance, Coldplay, Green Day, The Killers y un gran etcetera. Luego de eso, hubo un tiempo en donde sólo escuchaba Metal y Grunge. Me vestía como una versión joven de Eddie Vedder y Kurt Cobain. Estaba muy metido en esos géneros. Había algo que hacía que la música alegre no calara conmigo. Actualmente, escucho de todo, pero hay veces que ciertos sonidos alegres no los tolero; un ejemplo claro es el sonido de Alvvays.
Alvvays no es un grupo con una temática alegre; detrás de sus temas, siempre hay elementos de angustia, depresión, dudas y preocupaciones. Pero, el sonido de su música no es lo que me apasiona normalmente. Hay algo demasiado acaramelado en la voz de su lider, Molly Rankin, y la instrumentación de sus discos. No voy a decir que su música es mala porque me estaría mintiendo y siendo un cascarrabia con algo que no lo merece. Su música y sus letras son inteligentes y muy sinceras sin caer en insultos o groserías. El grupo tiene un sonido Indie Pop que se sabe diferenciar de muchos otros contemporáneos y, créanme, eso es algo muy importante en la actualidad. Así que, ¿qué hago yo escuchando su disco del 2017? Averiguar si la banda logró conectar conmigo.
El grupo canadiense volvió con uno de los discos más comentados en este año entre los fanáticos de la escena Independiente, Antisocialites (2017), la esperada continuación de su aclamadísimo álbum debut Alvvays (2014) que abrazó originalmente a todas las personas que lo escuchaban con un sonido dulce y muy pegajoso acompañado de singles como "Adult Diversion" y el adictivo y lindo "Archie, Marry Me". La pregunta era si el grupo seguiría con un segundo disco fuerte o se quedarían cortos con su segundo trabajo. Creo que la respuesta es que están casi a la par y, para ser sinceros, ahorita puedo decir el segundo por cuestión de hype , pero la realidad es que los siento muy parecidos.
Alvvays volvió con unos singles pegadizos como "In Undertow", que también abre el disco de manera excelente, "Dreams Tonite", la cual es por mucho mi favorita aquí, y "Plimsoll Punks", que no se queda muy atrás de las otras. Ahorita digo que me gustan, aunque al principio "In Undertow" no me causó mucho impacto. Es una de esas raras bandas que van gustándote más cuando repites algunas canciones. Es raro conmigo eso porque si al principio no me gusta algo, no me gustará luego. Es más, puede que lo odie más. Pero Alvvays es así conmigo. El álbum tiene ese aire de nostalgia que caracteriza al grupo y una música que viene influenciada por bandas como The Smiths, Camera Obscura, The Magnetic Fields y The Cranberries. Cada canción es extremadamente dulce, pero todo tiene su trasfondo no tan alegre como se ve, al igual que en el disco anterior. Son inocentes, pero no tanto. Claro ejemplo está, por ejemplo, la canción "Lollipop (Ode to Jim)", la cual, aparte de ser un guiño al cantante de The Jesus and Mary Chain, Jim Reid, trata de una relación con ciertas influencias de las drogas. Vuelvo y repito; no todo es tan inocente.
Esos 31 minutos que dura el disco llenos de aparente dulzura me envolvió en ciertos instantes, pero me perdían en varios momentos. Siento que este disco, al igual que el anterior, es destacable por sus singles mientras que las demás composiciones las aprecio como rellenos. Rellenos que, por cierto, me resultan insoportables a veces por la voz de la cantante y la música. Hay algo en su estilo que me repele como no tienen una idea. Lo considero un buen disco y lo recomiendo, pero me exaspera en las canciones que no son singles. Alvvays creo que serán una de esas bandas aclamadas por la crítica que nunca me terminarán de convencer y, aún así, no puedo evitar recomendarselas. Es probable que a ustedes les gustará bastante. No los culpo si les parece contendiente al Álbum del Año; tiene canciones asombrosas y muy lindas.
Nota: 6/10
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